The Cummoner 10
Una chica se escapa de su hogar en la noche, pero esta es sorprendida por lo que parece ser una amiga. Ella se llama Jugith y su amiga Emma, Judith le pregunta a su compañera si le puede guardar un secreto.
Cuando Emma le confirma, esta es llevada a una extraña localización, ya que parece una especie de ritual. Ella sin entender le pregunta a Judith que sucede, a lo que le responde que la bruja trajo dioses al campo.
Emma se confunde, pero es llevada hasta ellos, mientras Judith le dice al oído que le gusta que la vean. Resulta que estos dioses son los hermanos Arroyo y Bores que están libres en el mundo, y se encuentran divirtiéndose con los humanos.
Judith se coloca en frente de ellos y les pide que acepten su ofrenda, y cuando los hermanos le preguntan por ella, resulta que su ofrenda en su cuerpo. Ellos aceptan y se acercan a ella para prepararla en una noche que jamás olvidará.
Mientras Emma chupa el pene de Arroyo, Boreas utiliza la oportunidad para penetrarla por detrás, cosa que la enciende aún más. La ofrenda disfruta de chupar el gran pene al mismo tiempo que se toca al ser embestida.
Al ver como su compañera es sometida a la lujuria de estos seres, Emma comienza a excitarse pensando en ella. Tomando una de sus prendas caídas la huele para identificar el olor de Emma, esto le da aún más placer.
Podemos notar que Emma siente algo por Judith ya que, aunque esté presente a deidades esta sólo tiene ojos para ella.
La pelirroja comienza a estimular su clítoris mientras pide correrse al mismo tiempo que su amiga para disfrutar un orgasmo compartido. El ver a Judith ser tomada por Arroyo y Boreas hace que la desee aún más.
Los hermanos cumplen el deseo de Judith y terminan eyaculando en su cara mientras Emma despierta y la admira, pensando en recurrir a Vilga por ayuda.
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