Spidercest 7

Luego de una maratón sexual, Peter tiene un merecido descanso en la noche, pero no por mucho tiempo. Jess lo despierta y este no se molesta de ver su hermoso rostro a primera vista, ella le entrega su máscara y le dice que es hora de salir.

Fuera de su casa, Peter le pregunta acerca de lo que harán, pensando que se tratará algún asunto importante. Sin embargo, no se trata sino de sexo, y esta vez, sexo al aire libre.

Ellos nunca han hecho algo como eso, siendo esta su primera experiencia de este tipo, Peter no parece agradarle mucho la idea. Jess notando esto, le pide disculpas, además usa la oportunidad para confesarle que llegó a tener sexo con los demás clones de él.

Los dos se sinceran el uno con el otro, y mientras pasean por los aires, comentan sus anteriores experiencias sexuales.

La primera de Peter fue M.J, con quien en verdad no tuvo mucho contacto, ya que no pasaban de los besos y los roces. Una de las veces que llegó más lejos con ella fue cuando Wolverine cambio de cuerpos con él, quien se pasó de su límite.

No obstante, para calmar su lujuria, fue masturbado una gran cantidad de veces por ella.

Luego vendría Kitty, la relación de estos dos no pudo llegar a otro nivel puesto a sus obligaciones. Cada vez que estaban juntos tenían una serie de inconvenientes que les impedía divertirse.

Por ultimo está Gwen, la rubia hermosa que vivía con él, era casi imposible que no llegara a experimentar con ella. Usando sus poderes de Carnage, chupaba el pene de Peter y lo envolvía con su larga lengua.

Habiendo dicho todo acerca de su vida sexual, Peter quiere conocer la de Jess, para ella todo era más simple. En el laboratorio donde estaba, ella era la única mujer de sus clones, así que era utilizada por los demás cada día.